El deseo del ser humano de plasmar gráficamente lo que ve con sus ojos del mundo que le rodea, le ha acompañado desde sus más remotos orígenes.
Dibujos, pinturas, grabados, bajo-relieves, fotografías, vídeos, hologramas…,no son sino manifestaciones de ese deseo intrínseco del hombre
de inmortalizar las imágenes de esos momentos que dan forma a su existencia.
Origen de la fotografía
Si bien los historiadores sitúan los antecedentes de la fotografía en la cámara oscura y las investigaciones sobre las propiedades fotosensibles de las sales de plata realizados ya en el renacimiento de principios del siglo XVI, su germen no podemos dejar de encontrarlo en los estudios del matemático, físico y astrónomo musulmán Alhazen que ya por el año 995, aportó importantes contribuciones a los principios de la óptica, experimentando con lentes y espejos la reflexión y refracción de la luz.
Desarrolló la hipótesis de que la luz procedía del Sol y que los objetos que no tienen luz propia lo único que hacían es reflejarla, lo que les hacía visibles.
En su tratado sobre lentes describe la imagen formada en la retina humana debido al cristalino.
Pero es del año 1826 la fotografía más antigua que se conserva, una reproducción de la imagen Vista desde la ventana en Le Gras, realizada por Niepce con la utilización de una cámara oscura y un soporte sensibilizado mediante una emulsión química de sales de plata con una exposición de ocho horas a plena luz del día.s reflejarla, lo que les hacía visibles. En su tratado sobre lentes describe la imagen formada en la retina humana debido al cristalino.
Pero realmente la Historia de la fotografía empieza en el año 1839, con la divulgación mundial del primer procedimiento fotográfico: el popular daguerrotipo. Louis Daguerre con una cámara oscura sobre una superficie pulida de plata reducía considerablemente el tiempo necesario de exposición. Se fue desarrollando y reduciendo el tamaño de la cámara oscura así como perfeccionando las lentes y objetivos.
Eastmann, Kodak y otros avanzaron sobre el tema de los negativos y el papel fotográfico. En 1888 Kodak lanzó su primera cámara con películas de carrete enrollable abriendo el camino para las cámaras de instantánea fotográfica.
En el proceso fotográfico existían dos fases bien definidas: la realización de la instantánea sobre un material fotosensible o negativo fotográfico y su posterior positivado o revelado fotográfico.
En un principio todas las fotos eran en blanco y negro y se coloreaban a mano.
Y aunque se empezó a investigar y experimentar en este sentido no fue sino hasta la década de los mediados años treinta con KodakCrome y Agfacolor que se estandarizó la fotografía en color.
Pero el gran salto de la fotografía, tendría lugar con la llegada del mundo digital y sería a finales del siglo XX.
En 1990 aparece la primera cámara fotográfica que utiliza esta tecnología y con ella la gran revolución de la fotografía digital tanto en su captura
como en su posterior tratamiento.
Fotografía analógica y digital
Pero la fotografía es un arte. Y como toda disciplina artística, se vale de una técnica creativa para ser desarrollada. Y tanto la fotografía analógica como la digital se basan en el mismo concepto o premisa básica, pues la fotografía no es otra cosa que el proceso de captar una imagen por medio de su luz.
Para explicar clara y sencillamente el proceso fotográfico podemos decir que la luz reflejada por un objeto u objetos es decir, la imagen que nosotros vemos, ha de penetrar a través de una lente u objetivo por una obturación en una caja oscura o cámara y que impactará sobre un material sensible a la luz o fotosensible, en el cual reaccionarán una serie de compuestos químicos, los cuales imitarán la imagen original reproduciendo su fotografía en negativo. Tras su positivado en el proceso de revelado tendremos fotografiada la imagen que captó nuestro objetivo.
Así mismo, para su correcta exposición, esa luz deberá incidir durante un determinado tiempo y por una cantidad también determinada y en función de la capacidad fotosensible de ese negativo químico.
La distinción fundamental entre el proceso fotográfico analógico y el proceso fotográfico digital es puramente tecnológica. Pues la luz penetrará también por un objetivo en nuestra cámara digital a través de un obturador pero en lugar de impactar sobre una película química lo hará sobre un sensor electrónico capaz de analizar y procesar la información digitalmente, la cual se almacenará en una memoria y no precisa revelado.
Y aquí tenemos ya establecida la base que como fotógrafos hemos de comprender y dominar para hacer una fotografía: La búsqueda de la correcta exposición.
Para ello es interesante conocer los conceptos y la aplicación de la técnica fotográfica en función de las necesidades y posibilidades de las cámaras digitales y el posterior tratamiento también digital de las imágenes obtenidas.
Conoce nuestro curso Cámara réflex digital
Posibilidades de la fotografía digital
La fotografía digital abre un apasionante mundo de posibilidades creativas. Pero su éxito también se debe a una serie de razones netamente prácticas.
Normalmente, tras disparar una foto podemos visionar el resultado en una pantalla en la propia cámara digital y si no es el esperado, la podemos borrar y volver a intentarlo. Cosa con las analógicas impensable.
En las antiguas cámaras analógicas estábamos también limitados a usar carretes de 12, 24 o 36 fotos y para hacer más fotografías necesitábamos cambiar el rollo, sin embargo, una cámara digital nos permite realizar una mayor cantidad de fotografías dependiendo de la capacidad de memoria.
Al aspecto práctico se une también el del ahorro económico al no tener que asumir el consumo de carretes ni de su revelado.
Por otra parte la fotografía analógica solo cobraba realidad sobre papel, una limitación para el color y el brillo, mientras que la fotografía digital se visiona perfectamente sobre pantallas de ordenador, de TV, etc… esto enriquece la colorimetría al ser dispositivos que emiten luz y el brillo es más real y por lo tanto más parecido al original.
Así mismo, esta tecnología, al contener digitalizada toda la información de la fotografía nos permite fácilmente su acceso para ser modificada, corregida o mejorada también digitalmente por medio de un software o aplicación específica.
Otra de las grandes ventajas consiste en la facilidad para compartir las fotografías digitales por internet, en telefonía móvil o en archivos en un pendrive. Así como organizarlas, archivarlas y conservarlas sin deterioro y siempre listas para imprimir en cualquiera de los diferentes formatos de archivo de imagen.
La tecnología digital también a acercado al usuario amateur, calidades y prestaciones solo disponibles en otra época para profesionales. Hoy en día con una sencilla cámara digital se pueden hacer fotografías de una gran calidad y alta resolución.
La resolución de una fotografía digital depende de la cantidad de píxeles que contengan su información.
La imagen que se obtiene de una cámara digital está formada por pequeños puntos, los llamado píxeles. Cada uno de estos píxeles contiene un color e información determinada.
La cantidad de estos hará depender la resolución de la imagen, es decir, su nitidez y definición. Esta resolución se cuantifica en píxeles por pulgada y cuantos más tenga una imagen más perfecta será y por lo tanto mayor su resolución.
Te invitamos a visionar:
El vídeo-documental en nuestro canal de YOUTUBE
Desde El Profesor Online queremos comunicaros una gran notícia:
Hemos llegado a un acuerdo de colaboración con National Geographic, mediante el cual todos vosotros sólo por ser alumnos de El Profesor Online, podéis adquirir grandes ofertas y descuentos.
¨SLR Camera simulator¨ es simulador virtual a modo de herramienta para comprender los tres pilares de la exposición fotográfica (Apertura, Velocidad e ISO) y de la importancía de estos factores para mejorar nuestras fotografías.
Con este fantástico simulador de cámaras DSLR podrémos poner en práctica todo lo estudiado en nuestro curso online de Cámara Réflex Digital o en los cursos presenciales de fotografía.
La fotografía es el arte de trabajar con la luz para captar imágenes. Las cámaras fotográficas se valen del diafragma para utilizar la luz.
El diafragma es una parte del objetivo que funciona similar al iris del ojo humano, abriéndose y cerrándose para regular el paso de la luz. El diafragma nos permite regular la cantidad de luz que queremos llegue al sensor.
Hacer una fotografía es algo con más significado que el simple hecho de hacer click en una cámara. Conlleva una intención por parte del fotógrafo de mostrar una percepción personal de lo que ve y que pasa por la selección y la organización del contenido de su imagen.
¿Es lo mismo fotografíar un día nublado que un día luminoso? ¿Es igual una fotografía exterior por la noche que una fotografía en un interior? ¿Es lo mismo hacer una foto de una modelo iluminada por las luces fluorescentes de una nave que por los focos halógenos de un escaparate? Evidentemente, no, puesto que la fotografía se basa en la luz y las condiciones luminosas de los casos mencionados son claramente diferentes. Esa diferencia que notamos radica sobre todo en la llamada temperatura de color.
Para poder sacar el máximo partido de Lightroom, primero debemos comprender bien la estructura interna que el programa aplica para el visionado de las imágenes.
Cuando importamos las fotografías a Lightroom, automáticamente las visionamos en el módulo biblioteca. Esta visualización, lo que hace en realidad es generar una previsualización de tamaño medio. Ello nos permite varias opciones, como ver correctamente las fotografías en sus miniaturas, poder ampliar estas miniaturas mediante el uso del deslizados zoom que tenemos aquí debajo a la derecha y si hacemos doble clic sobre una de las fotografías podremos visionarla por separado y a un tamaño mayor como podéis comprobar.
Tenemos el placer de comunicaros, a todos los alumnos de nuestro curso Cámara Réflex digital, que ya está a vuestra disposición una nueva unidad del Curso. Como ya sabéis dentro de la filosofía de servicio docente de nuestra plataforma, las actualizaciones y ampliaciones de nuestros cursos no conllevan ningún gasto añadido, por lo que podéis acceder al estudio de la nueva unidad con vuestras claves de acceso personales. Esperamos sea de vuestra satisfacción.
Sin menospreciar la opinión de muchos puristas, que creen tan solo en el instante del click - ese momento mágico del fotógrafo en que captamos con nuestro objetivo instantes de la vida que tal vez no vuelvan a repetirse, capturándolos en el espacio sobre una imagen estática que los hace atemporales - nosotros entendemos que el retoque digital de una fotografía abre un océano de posibilidades creativas a ese fotógrafo con sensibilidad y talento.
Hacer una fotografía es algo con más significado que el simple hecho de hacer click en una cámara. Conlleva una intención por parte del fotógrafo, de mostrar su percepción personal de lo que ve y que pasa por la selección y la organización del contenido de su imagen.
Quizás podríamos afirmar que de ello dependerá la diferenciación entre una buena o una mala fotografía.